La maternidad no es el problema

No, la maternidad no es el problema. Que sí, que ser madre (o padre) es un giro de 360 grados a tu vida “antes de tener hijos” pero te aseguro que procrear no es el problema. Hay otras muchas cosas que influyen en que ahora todo lo veas distinto. Y te sobrepase. Y te agobie. Y hasta te canse. Porque la maternidad tiene efectos secundarios. Sí, como el prospecto de unas pastillas que no te lees por miedo a lo que encontrarás.

Sigue leyendo

La locura de los regalos para los profesores

Los grupos de Whatsapp de padres están que arden estos días. Se acaba un nuevo curso pero parece lo que se acerca es el fin del mundo. Levantarte y ver en la pantalla del móvil 89 mensajes en un grupo y 75 en otro. Taquicardia. Ah no, que no pasa nada grave. La conversación a altas horas de la madrugada se debe al tema del momento: los regalos para los profesores. Arderé en el infierno de las malasmadres por esto que voy a decir pero, alguien tiene que hacerlo.

Sigue leyendo

Celos entre hermanos

Los celos entre hermanos creo que es una de las cosas que más escuchamos los padres cuando tenemos otro hijo. Desde que el hermano está en la barriga, los mayores se hartan de escuchar frases sobre este tema, algunas sin mala intención, pero que en el fondo creo que los condicionan a comportarse de una u otra manera. Y yo empiezo a estar un poco cansada que cualquier cosa se relacione con esto o sea motivo para sacar a relucir la maldita palabra: CELOS.

Sigue leyendo

Cómo organizarse con niños pequeños

Organización. Una palabra clave para mí antes de ser madre que ahora, con dos hijos, se ha vuelto casi un mantra que tengo que llevar un poco a rajatabla para no caer en el caos absoluto. Sí, antes de ser madre ya era una persona organizada. Y lo sigo siendo en todas las facetas de mi vida, en mi casa y en mi trabajo. Pero es cierto que cuando llega la descendencia, la cosa cambia. Hoy os cuento cómo organizarse con dos niños pequeños o, al menos, como lo hacemos nosotros.

Sigue leyendo

Conformismo

Había prometido no escribir este post hasta que no se me pasara el cabreo pero va, voy a tirarme a la piscina. No entiendo a la gente. Así, en general. No sé cómo  a veces no nos extinguimos como raza humana. ¿Cómo podemos quedarnos sentados, impasibles, ante según qué situaciones e injusticias? ¿A qué se debe ese conformismo tan desquiciante?

Sigue leyendo

Dos hijos… ¿el doble de trabajo?

Las matemáticas no siempre son exactas. Un buen día, cuando ya has superado la bofetada de la primera maternidad y has aprendido que A. nunca más vas a volver a ir al baño sola y B. lo de dormir, ya tal… piensas que, oye, quizá no es mala idea ir a por el segundo. Que los bebés son muy monos, los hermanitos se querrán un montón y ya, si eso, volverás a tener vida de pareja cuando se vayan a la universidad. Total… dos hijos debe ser “solo” el doble de faena que uno ¿no?

Sigue leyendo