¿Sabéis esa sensación al descubrir un producto sencillo pero que a nadie se le había ocurrido antes inventar? Por obvio, por facilón…. Hay utensilios que marcan un antes y un después en nuestro día a día. Es el caso de Ponny, la pata antivuelco para las sillas de paseo ligeras (las de segunda edad). Esta pata es un accesorio muy práctico ya que impide que las sillas de paseo vuelquen por exceso de peso. ¿Quién no ha colgado el bolso, la bolsa de la compra, el abrigo, etc.etc.etc en el manillar de la silla y al bajarse el peque… ¡zas! todo al suelo!?!?! Pues esto se terminó.
La pata antivuelco Ponny
Cuando descubrí la pata Ponny me quedé alucinada. ¿Por qué nadie la inventó antes? ¡Hace décadas que se usan las sillas de paseo y décadas que se caen hacia atrás! Un invento tan sencillo y a la vez tan práctico…. Teníamos que probarlo.
Ponny nació de la necesidad de una familia de Lleida que, tras ver como su silla de paseo caía una y otra vez, decidieron investigar qué podría evitar esto. Y así nació Ponny, el único antivuelco para sillitas de paseo patentado, y la Ponnyshop.com.
Cómo funciona Ponny
La pata ponny es un accesorio con forma de caballete que se instala con facilidad en la parte trasera de las sillas de paseo ligeras, es decir, aquellas que se pliegan como un paraguas. Se instala una vez y se queda allí plegado, sin molestar y sin interferir en el cierre de la sillita. Vamos, que como si no estuviera.
La función de Ponny es evitar que las sillas de paseo vuelquen ejerciendo de contrapeso, algo que además de ser un engorro acaba por perjudicar a la sillita, sus complementos y lo que hayamos colgado.
Lo mejor de Ponny es que es compatible con la mayoría de sillitas plegables del mercado (un 98% de estas). Vamos, que es más fácil encontrar las que no son compatibles que las que sí lo son. Aun así, si tenéis dudas podéis contactar con Leonor y David que os atenderán divinamente.
El precio de Ponny es más que aceptable, 29 euros, y la podéis comprar en Ponnyshop (sin gastos de envío), en Amazon o en varios de los puntos de distribución que hay por toda España.
Nuestra experiencia con Ponny
Llevamos unos días probando Ponny y estamos encantados. Ahora mismo no le damos mucho uso a la silla de paseo, porque el mayor suele ir andando, pero en unos meses volveremos a la carga con la pequeña.
Instalación y montaje
La instalación de Ponny es sencilla, pero nos ha llevado algo más de tiempo del que pensábamos. ¿El motivo? Hay que cerciorarse de que está bien instalada y que forme el ángulo correcto, para que funcione de manera óptima. El ángulo de inclinación no debe superar los 30º para que esté lo suficientemente tenso. O lo que es lo mismo, si miramos desde el manillar hacia el suelo, lo ideal es que la pata Ponny no sobresalga.
Eso, y que por error la montamos en la parte izquierda de la silla. Ponny se instala en la parte derecha de la silla. Lleva una pieza que se acopla con tornillos a una de las barras de la silla de paseo. Una vez montada, se puede plegar, quedando integrada perfectamente en la silla paraguas.
características
Las grandes ventajas de Ponny es que no se nota cuando está instalado, ya que se pliega perfectamente y no molesta para cerrar la sillita. Además, pesa muy poco (unos 300 gramos) por lo que no se nota que la llevamos instalada y no resulta ningún engorro.
Para utilizarla, se despliega con la mano en un sencillo gesto y para guardarla, incluso de puede recoger con el pie. Visto y no visto.
Utilidad
Ponny es un accesorio muy práctico. ¿Se puede vivir sin él? Sí, claro. Pero es realmente cómodo fijar la silla de paseo para que no caiga simplemente desplegando la pata Ponny y el día a día con niños ya es bastante non-stop como para no buscar facilidades.
Y además, si tenéis silla de paseo (para los viajes, para cuando los abuelos se quedan a los peques, etc.) es muy amortizable. Las sillas de paseo se usan desde aproximadamente los 6 meses y algunas aguantan hasta los 20 kg, por lo que durante 3 años mínimo, vais a usar la silla. ¿Mejor hacerlo con total comodidad, no?
¿Funciona?
Supongo que esta es la pregunta que nos hacemos todos cuando se trata de un producto novedoso. En este caso, funciona. Es un accesorio simple, una pata de apoyo que no tiene más misterio que ofrecer un punto antivuelco para las sillas de paseo cuando las sobrecargamos. Así que cumple su función a la perfección. Aún así, si el producto no os convence cuando lo tengáis en vuestras manos, tenéis 15 días para devolverlo y os retornarán el dinero. ¿Fácil, no?