Jugar no es (o no debería ser) simplemente pasar el rato y entretener a los niños, sin más. El juego es la fórmula por excelencia de aprendizaje, sobre todo en edades tempranas, en las que cualquier estímulo les supone una nueva experiencia y conocimiento. Para nosotros es muy importante que el peque juegue con juguetes educativos y de calidad y no pase el rato simplemente pulsando botones de un cachivache como si de un robot se tratara. Es por eso que el post de hoy me gusta especialmente, ya que, gracias a la gentileza de Kibi Toys, hemos podido probar un juguete sensorial fantástico: el Kibi Memory Sonidos.