Viernes, 14.00 de la tarde, ding dong. ¡Un paquete! (¿otro paquete?, diría mi maridín). ¡Es mi primera cajita Nonabox! ¡Y viene cargadita porque pesa lo suyo! Estoy super contenta, porque me encanta recibir cositas y encima esta ha sido una sorpresa absoluta, ya que apenas conocía los productos de Nonabox y no sabía qué incluiría. Se trata de la Nonabox del mes de octubre y es una pasada. Es la primera vez que recibo una canastilla de este tipo y pensé que traería algo parecido a lo que incluyen las que te dan en las clases de preparación al parto o en el hospital: chupete, un par de pañales, agua…