Bienvenidos a una nueva serie de posts anti cuquis donde os voy a hablar de cositas escatológicas que dan asquete pero… ¡que son muy útiles! La idea era empezar con el post de los piojos, pero lo dejaremos más adelante porque la última novedad en casa ha sido la presencia de unos gusanitos muy desagradables en el culo de mi hijo. Así es, ¡mi hijo tiene lombrices! Os voy a contar nuestra experiencia porque creo que coger el tema a tiempo es fundamental para evitar la propagación y contagio de toda la familia.