Hace exactamente dos años, el 28 de septiembre a las 10.50h, nacía mi bombón. Si alguien os dice que cuando tienes niños el tiempo corre, os engañan. ¡El tiempo vuela! Pero si yo antes de ayer estaba gorda como una pelota y a punto de parir! Pues no, han pasado dos años. Dos años geniales en los que he aprendido muchísimas cosas y me he reído cantidad (y llorado también, para qué mentir). Porque la maternidad es bella… pero dura.