Hoy voy a hablaros de uno de los dolores de cabeza más típicos de los padres: ¿cómo elegir guardería? ¿En qué debemos fijarnos? ¿Qué criterios seguir? Pronto se abrirá (al menos en Catalunya) el período de preinscripciones para los centros de educación infantil (guarderías o como se llaman aquí, llars d’infants y escoles bressol). Nosotros hemos decidido que en septiembre, casi con 2 años, el peque irá a la guardería. Y estos días hemos estado analizando las posibilidades a nuestro alcance. Elegir ha sido relativamente sencillo porque ambos tenemos las ideas muy claras. Finalmente, tras visitar una guardería municipal y una privada, si no cambia nada, irá a la municipal por algunas razones que os detallo a continuación.
Proximidad. En nuestro caso sólo hemos mirado guarderías de nuestro municipio. No estamos dispuestos a coger el coche para llevar al peque porque en nuestro pueblo hay opciones interesantes y así es más sencillo a la hora de llevarlo y recogerlo, también para los abuelos si se diera el caso. Dentro de la localidad, también nos hemos decantado por los centros más cercanos a nuestro domicilio, por la misma razón, pensamos que es más cómodo y, además, en el caso de las guarderías municipales que van por sistema de puntos, es más probable que nos concedan plaza en una cercana. Las dos que miramos están muy cerca de casa, así que este no ha sido el factor decisivo.
Proyecto educativo. Para nosotros es fundamental que la guardería tenga un proyecto educativo en el que lo primero sea el niño y sus necesidades. Este ha sido el factor clave para descartar la privada. El día que la visité (que tengo que decir que salí contenta porque la dueña era muy agradable) los peques estaban sentados en mesas pintando. Una niña se levantó al verme en la puerta y se llevó una buena bronca por hacerlo. Puede parecer una chorrada o una mera anécdota, pero no me gustó. Me fijé que todo estaba ordenadísimo, como si no hubiera rastro de actividad infantil por allí. En la guardería municipal que hemos elegido, en cambio, el día que fui (fuera de horario escolar), la directora me dijo: “nuestro proyecto educativo es experimental, no queremos a niños haciendo fichas”. ¡Bien! ¡Menos mal! El aprendizaje en ese centro se basa en el juego y la experimentación, y se fomenta una actitud curiosa e investigadora. Buen punto de partida.
Número de niños por aula y profesora. A priori era un aspecto que íbamos a tener muy en cuenta. En la privada eran unos 5-6 niños por profesora y en la municipal (en la clase de p2) serán 20. La cifra es considerable, pero aun así, me sigue convenciendo más por el proyecto educativo que ofrece. Además, las profesoras de la privada son muy mayores y las de la municipal son jóvenes, y creo que con más energía para hacer frente al reto de estar con tantos niños a la vez.
Precio. A final de mes los números tienen que salir, sí o sí y, por tanto, la cuota mensual hay que estudiarla mucho. Aquí la privada (sorprendentemente) es la que tenía más puntos. 150 euros mensuales (tanto si es en horario de mañana, como de tarde o todo el día). La municipal, en cambio, son 170 euros al mes en horario de mañana (232 todo el día, y 154 la tarifa mensual del comedor). Nuestra idea es que el peque vaya sólo por la mañana. Mientras yo pueda organizarme, lo recogeré para darle de comer y estar con él por la tarde, y si no, lo hará una de las abuelas. Personalmente creo que un niño tan pequeño es mejor que no haga un horario tan extenso de mañana y tarde en la guarde. Entiendo que hay gente que, por circunstancias varias, no tenga más remedio, pero yo si puedo prefiero evitarlo. Y, por el mismo motivo, tampoco quiero que coma en el comedor escolar.
Instalaciones. Para nosotros es importante que sea una guardería amplia, donde los niños tengan espacio para jugar y moverse libremente, que tenga patio para poder realizar también actividades en el exterior, que tenga varias zonas de juego y actividades (por ejemplo, una zona para realizar actividades de psicomotricidad distinta del aula, una zona con hamacas o cunas para descansar, una zona para comer, un espacio donde lavarse y cambiarles el pañal o usar el wc…). Disponer de estos espacios fomenta la autonomía de los niños (ellos solos pueden lavarse las manos, ir al baño cuando no lleven pañal) y, además, creo que tener diferentes áreas les hace más amena la jornada. El centro que hemos elegido cuenta con todos esos espacios, mientras que la guardería privada que visitamos no tenía apenas sitio y los espacios eran polivalentes: había una sala pequeña donde pasan todo el día, un patio y la zona donde cambiarles el pañal.
La adaptación. La adaptación de los peques a la guardería puede ser un proceso variable, en función de cada niño. Si bien hay algunos que desde el principio se encuentra a gusto, hay otros que tardan días, semanas o hasta meses en adaptarse. Personalmente creo que al mío le va a costar bastante, así que este punto me interesaba bastante. En la guardería privada no me quedó claro cómo lo hacen, pero en la municipal me comentaron que es una decisión de la familia. Por ejemplo, los primeros días podemos quedarnos en clase con el peque, luego lo podemos dejar un ratito corto a ver cómo reacciona y así hasta cubrir toda la franja horaria. La idea, como me explicaron, es que él aprenda que siempre lo vamos a ir a recoger (perdonadme, pero a mí me da mucha pena pensar que él va a estar llorando a mares creyendo que no voy a volver…snif snif).
Servicios disponibles. Un factor muy a tener en cuenta. Algunos centros disponen de comedor (ya sea con cocina propia o servicio de catering); horas de acogida antes y después de la jornada por si, por el motivo que sea, necesitamos ampliar un poco el horario y que nos dé tiempo a dejarlo y recogerlo; etc. El centro que hemos elegido cuenta con esos servicios que, aunque en principio no los vamos a necesitar – por eso este punto está al final de la lista – siempre va bien saber que están ahí por si hace falta.
El rol de los padres durante el curso. Mi marido y yo buscamos una guardería abierta a los padres, en la que podamos participar durante el año (en actividades que se organicen, ayudando al peque para que se adapte mejor, etc.). Un motivo más para decantarnos por la municipal.
¿Vosotros lleváis a los peques a la guardería? ¿En qué os fijasteis para elegir?
La verdad es que son muchos los aspectos a valorar…De hecho la guarderia a la que fueron mis hijos no tenia unas grandes instaaciones: muchas escaleras, patio pequeño..pero la educación y el trato a los niños era muy bueno, la cocina muy familiar y estaba cerca de casa. Suerte con la elección!!
Supongo que la guardería perfecta no existe! jajajaja No se puede tener todo, y a cada familia le conviene una cosa distinta…también en función de las circunstancias. Nosotros, en otro momento, igual hubiéramos dado más importancia a otras cosas, pero ahora mismo, esa ha sido nuestra elección. Muchas gracias por pasarte y comentar!!!
muy buena entrada con aspectos muy importantes a tener en cuenta. el año que viene me tocará a mi ponerme a mirar guardes 😉
Muchas gracias, la verdad es que me esperaba romperme más la cabeza, hemos sido muy prácticos porque íbamos con las ideas bastante claras 😉