Vuestros deseos son órdenes. Aquellos que visteis en mi Instagram la pinta que tenía la quiche de verduras me pedisteis la receta. Pues aquí está. La quiche es un plato de origen francés muy fácil y rápido de preparar. Es muy versátil (la puedes hacer de muchas cosas distintas) y muy socorrido para una cena en la que no tienes ni idea de qué preparar. Sigue leyendo porque esta quiche de verduras es ideal para los amantes de los vegetales pero también gusta a aquellos que no son muy green-lovers. Si tenéis niños que rehuyen de las verduras, esta quiche les encantará.
Categoría: maternidad
9 mentiras sobre la maternidad que me creía antes de tener hijos
¡Qué bonita es la maternidad! Y la bimaternidad… ni os cuento. Es morir de amor por partida doble… y también desesperarse por partida doble. Es una montaña rusa de felicidad y mosqueos, por lo menos en mi caso. Para qué engañaros. Para qué mentir sobre estos temas, si tarde o temprano si descubre la verdad. Y es que sobre la maternidad se miente, se esconde la parte menos bonita y todo es fantástico y maravilloso. No creo que se haga con mala intención, simplemente son cosas que pasan de generación en generación, y se convierten en mantras. Pero no lo son. Estas son las 9 mentiras sobre la maternidad que me creía antes de tener hijos.
Los maravillosos 3 años
A veces nos referimos a los niños de dos y tres años con calificativos despectivos o denominamos a esa etapa como “los terribles 2, 3, ….”. Yo misma, hace unos días os hablaba de los terribles 3 años y os contaba que desde verano hemos atravesado por una época complicada con el peque, con muchas rabietas y enfados. Sí, los 3 años son difíciles por muchas cosas pero también son fantásticos. Y, para ser justa, tengo que decir que los grandes momentos superan a los malos. Porque a esta etapa también se la podría conocer como los maravillosos 3 años.
Grietas durante la lactancia materna: mi experiencia
Después de la experiencia durante mi primera lactancia, que terminó hace justo un año tras 26 meses dando el pecho, nunca me imaginé escribir este post. Y mucho menos teniendo en cuenta cómo fueron los inicios amamantando a mi segunda hija, sin complicaciones, todo perfecto… Pues bien, con casi dos meses que tiene, tengo grietas en el pecho. Las grietas durante la lactancia materna son algo muy temido, uno de los mayores miedos y frenos a la hora de dar el pecho y hoy quiero contaros mi experiencia.
Cómo gestionar las rabietas de los niños
Si pensáis que la preadolescencia de los niños se sitúa cerca de los 10 años, estáis muy equivocados. Como madre de uno de 3 años, os aseguro que tenemos en casa un preadolescente, un niño que es el más feliz del mundo y al minuto, está enfadadísimo ¡y ni siquiera sabe(mos) el motivo! Como os contaba al hablaros de los terribles 3 años, la etapa de las rabietas y conflictos ha llegado a casa. Y parece que para quedarse. Por eso en este post quiero contaros cómo gestionar las rabietas de los niños. Sigue leyendo
Curando viejas heridas: mi segundo postparto
La matrona de mi primer embarazo dijo una frase durante las clases de preparación al parto que me marcó: “Hoy voy a dar una de las charlas que más odio dar, pero que más me agradecen las madres: el postparto”. Cuánta razón tenía. A nadie le gusta que le digan que cuando llegue el esperado momento, cuando llegue su bebé, puede ser que se sienta mal, triste, desanimada o que, incluso, deprimida. Pero puede suceder. El postparto es un momento muy duro en el que se mezclan muchas sensaciones y sentimientos. Pero en esta ocasión, tras nacer mi hija, estoy curando viajas heridas con mi segundo postparto.
Los terribles 3 años
Desde el silencio del salón de mi casa (algo casi milagroso de conseguir) hoy escribo un post de esos que ojalá no tuviera que hacer. Porque odio tener que escribir sobre cosas malas o desagradables, por muy normales que sean, por mucho que sucedan en otras casas. Hoy vengo a hablaros de algo que me desquicia bastante: los terribles tres años.
Primera crisis en la lactancia materna
Con la teta fuera. Este sería un buen resumen de mi vida en los últimos días. Y es que estamos en pleno brote de crecimiento, en la primera crisis en la lactancia materna. Están siendo días (y sobre todo, noches) duros, pero por suerte esta vez no me ha pillado por sorpresa y sé exactamente lo que tengo que hacer: tener paciencia. Es normal y pronto pasará.